12 junio, 2007

El ahogado



El ahogado no ha aparecido, estará
negro de luto sobre el barro en el fondo del río,
cansado de haber muerto ahogado y de no saber
que los otros tres ya se han secado y tienen sus flores,
de que no lo hayan encontrado.
Dentro de un tiempo se habrá hecho agua
-tendrá perlas por ojos- se habrá
hecho gotas de agua y estará enterrado en las manos
de su novia, que aún entonces no habrá
dejado de llorarlo porque tiene 17 y las novias
de esa edad no buscan a sus novios en las
alcantarillas de la Ciudad de Buenos Aires, sino
en la cama, y los desvisten y los besan de noche y de día.



Enrique Morasca

1 comentario:

Anónimo dijo...

este te lo pase yo che?